Nacer de agua y del Espíritu
“En verdad, en verdad te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios”. Estas son las conocidas palabras de Jesús a Nicodemo en Juan 3:5 . Ahora, ¿qué nos está diciendo el maestro? Aunque la Biblia no nos explica claramente lo que Cristo quiso decir, a lo largo de los años han surgido distintas interpretaciones. Una de estas interpretaciones es que el termino “nacer de agua” hace referencia al parto natural, y la alusión al nacimiento del Espíritu nos habla de la necesidad del nuevo nacimiento en Cristo. Tiempo atrás volví a escuchar un sermón sobre la mujer Samaritana, y el Señor comenzó inquietar mi mente sobre la conexión que había entre el agua de la que Jesús le habla a ella y de la que le habla a Nicodemo. Cuando la mujer Samaritana le pregunta a Jesús el porqué le pide a ella que le dé agua de beber, Él le contesta: “Si tú conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: “Dame de beber”, tú le habrías pedido a Él, y Él te hubiera da